Tales of Symphonia Chronicles

Por el momento solo he podido disfrutar de la historia original del juego (Tales of Symphonia), por lo que me limitaré a hablar sobre ella y dejaré su secuela (Dawn of the New World) para cuando termine de jugarla.

Hasta hace poco desconocía la existencia de este juego. En algunas ocasiones algunos de mis amigos lo habían mencionado pero yo le había restado importancia tratándolo como un juego más.

Sin embargo, el otro día me enviaron un soundtrack titulado Sheena’s theme que llamó mi atención. Como soy un gran fan de las bandas sonoras de los videojuegos, especialmente si se trata de videojuegos japoneses, decidí escucharla. La única palabra que encuentro para describirla es excelente. Por más que lo intentaba esa melodía me obligaba a seguir reproduciendo la canción una y otra vez, como si estuviera escuchando al flautista de Hamelín, era algo completamente hipnótico.

No podía quedarme con la duda de saber la procedencia de  esa joya musical y afortunadamente no tuve que buscar demasiado pues en el propio vídeo salía escrito Tales of Symphonia de forma que me ahorro unas horas de búsqueda.

Me dispuse a buscar qué era Tales of Symphonia. ¿Una película? ¿Un videojuego? ¿Un anime? La segunda opción resultó ganadora y encontré información sobre este videojuego. En cuando vi que había sido lanzado en 2003 mis ánimos cayeron por los suelos por el miedo a que hubiese sido descatalogado o que solo hubiese sido lanzado en Japón.

Para mi fortuna descubrí que hacía un año habían sacado una remasterización del juego, que encima eran 2 juegos en 1 por un precio bastante asequible así que, aún hipnotizado por esa dulce melodía, cogí el coche y me fui a la tienda de videojuegos más cercana que todavía tuviera existencias del juego en el almacén y en un impulso consumista adquirí el juego.

Llegué a casa sobre las 19:00 horas y empecé a jugar…

La primera impresión del juego no fue demasiado impresionante, valga la redundancia. Los gráficos son ligeramente anticuados si lo comparamos con los juegos a los que estamos acostumbrados actualmente, lo cual es normal ya que el juego no es actual sino del 2003. Sin embargo, no se puede decir que no estén bien elaborados. Namco Bandai ha realizado un trabajo excelente y el HD resalta los colores y la calidad de imagen.

Antes y después de la remasterización en HD 

Ya sabía lo que me esperaba cuando me compré un juego de 2003, y sinceramente pensé que tal vez me cansaría, pero que equivocado estaba…

Nada más empezar tenemos un pequeño opening con una canción preciosa y tras él nos espera el menú de nueva partida que comienza también con una melodía acompañada de la historia introductoria. Sí, en este juego la OST sale a relucir con todo su esplendor en todo momento.

“Parece interesante” Esas fueron mis palabras con tan solo unas pocas líneas que hablaban sobre el mundo de Sylvarant, un misterioso árbol de maná, la regeneración del mundo en declive y poco más.

La Villa de los Oráculos: Iselia

Tardé menos de 1 hora en ser absorbido totalmente por la historia y ni siquiera había salido del pueblo inicial de Iselia. Muchos interrogantes abiertos que te dejan con la miel en los labios y sientes la inquietante necesidad de saber que está pasando, que va a pasar, qué planes tienen… y cientos de dudas más que me asaltaron rápidamente.

Al principio pensé que sería como todos los juegos, ya han sentado las bases de la historia y los misterios y ahora empezarán a resolverlos hasta el final del juego. Pero no fue así. A medida que avanzaba con el juego surgían nuevas dudas, hasta el punto que pensé que debía detener el juego, coger papel y boli, y empezar a apuntar todos los interrogantes.

¡Pero no podía dejar de jugar! Quería saber que iba a pasar en todo momento y cada vez que parecía que iba a resolver algo, lo único que conseguía era añadir más incertidumbre. En ese aspecto, debo decir que la historia de Tales of Symphonia es, sin lugar a dudas, una de las mejores historias que he tenido el placer de disfrutar.

Yo he tardado 78 horas en completar el juego. 78 horas de puro vicio generado por la ansiedad de un hilo argumental sublime, cargado de giros inesperados y sorpresas que consiguieron dejarme pegado al sofá y sin poder apartar mi mirada del televisor.

Sin embargo, os advierto que no son solo 78 horas de juego y dejar el juego en la estantería, no. Solo he completado la historia principal, debo recordaros que es un juego RPG, o dicho de otra forma, las posibilidades de este tipo de  juegos son ilimitadas. Hay muchas misiones secundarias y muchos misterios a los que no he podido dar respuesta todavía. Sí, todavía. Pienso empezar una nueva partida para completar el juego al 100 % ya que, personalmente, considero que se ha ganado el derecho a mostrarme todo lo que tiene.

Genis Sage

En cuanto a los personajes, cada uno tiene su propia historia y la vamos descubriendo poco a poco a medida que avanza el juego. Todos tienen una personalidad bien definida, hasta el punto que te encariñas con alguno de ellos y puedes llegar a sentirte identificado. Mi favorito de esta saga es Genis, sus artes mágicas me han salvado en multitud de combates y además su personalidad curiosa e inteligente me recuerda a mí.

Vamos ahora al motivo principal por el cual me compré el juego: Sheena’s theme. Tras jugar el juego he descubierto que no hay solo una pequeña joya musical, sino que toda la OST es preciosa.

La música es uno de los elementos que más contribuye a hacer vívida la historia de un juego, especialmente si se trata de un RPG. Mentiría si os dijera que no me he parado en algunos momentos del juego solo para deleitarme los oídos con unos temas que yo califico de obras maestras.

Incluso si los videojuegos no son lo vuestro, de verdad os animo a escuchar la OST del Tales of Symphonia, no os arrepentiréis. Podéis usarla para escribir, justo como yo estoy haciendo ahora mismo. La música ambiental relaja el cerebro y este deja fluir las ideas con más rapidez, algo que puede ayudar tanto a nivel de inspiración en el caso de la escritura como a nivel de relajación para el estudio.

Si analizamos ahora la jugabilidad, creo que es muy dinámica y entretenida. Deja libertad a la hora de moverse, defenderse y atacar y los personajes responden bien a las tácticas y roles que se les ha asignado. En ningún momento me he sentido aburrido del sistema de combate, de hecho me ha parecido divertido, me ha recordado mucho al Ni no Kuni, que tiene un sistema similar.

En Ni no Kuni, el sistema de combates es muy parecido y cuando nos movemos por el mapa nos encontramos también un mundo abierto que podemos explorar a nuestro ritmo. Para que os hagáis una idea de la dimensión que tiene, os diré que yo me he perdido varias veces entre las misiones.

Vamos ahora al punto del que la mayoría de gente se queja: la dificultad. El juego tiene 3 tipos de dificultad, yo al ser mi primera vez decidí  jugarlo en novato para no tener demasiados contratiempos. Sin embargo, me llevé una sorpresa al ver que a pesar de estar en novato, la dificultad de los combates era bastante alta y en algunas ocasiones tuve que pararme a entrenar porque no podía vencer a los jefes, lo cual no es nada malo, al contrario, algo excesivamente fácil al final termina siendo aburrido.

Sylvarant

Otro tema en el ámbito de la dificultad son los puzles que hay que resolver para avanzar en algunas ciudades y mazmorras, prácticamente en el 95% de ellas tuve que utilizar mi ingenio y varios intentos para conseguirlo. Es un juego de los antiguos, en aquellos tiempos muchos juegos te obligaban a estrujarte los sesos para que te esforzases por avanzar en el juego, y esto es precisamente lo que hace Tales of Symphonia.

En ese sentido no es malo, aunque reconozco que algunas veces se echa de menos algunas pistas sobre el rumbo que hay que tomar, no tanto con los puzles de las mazmorras sino más bien en el mapa general ya que hay veces en las que ni siquiera te dicen a donde debes ir a continuación, ni te dan ningún tipo de pista en las conversaciones así que tienes que empezar a explorar y rezar por que tengas suerte. Esto a veces se me hizo algo pesado, tuve que dar muchas vueltas por el mapa y visitando muchas ciudades hasta dar con la correcta.

No quiero alargarme demasiado con la reseña ya que estoy seguro de que muchos de los lectores que hayan llegado hasta aquí estarán pensando cuando demonios se calla este tío, así que procuraré ser breve.

Teniendo en cuenta todo lo que he dicho anteriormente en la reseña, considerando tanto la jugabilidad, como los gráficos remasterizados en HD, la OST, el tiempo de juego y, especialmente la épica historia que nos ofrece el juego, considero que Tales of Symphonia es una obra maestra y os recomiendo que le deis una oportunidad, os aseguro que no os decepcionará.